Una vez mas el 12 de octubre con motivo del “Día de la Hispanidad” o la Fiesta Nacional de España, mientras se conmemora el “descubrimiento” de América es una fecha en la que el Estado español opresor, despliega su arsenal ideológico para fortalecer su identidad nacional española e imperialista. En este dia se han celebrado diferentes actos institucionales como el desfile militar presidido por primera vez por Rajoy, una acto que quisieron presentar como “austero” por la crisis – aunque con un presupuesto de 900.000 euros- y en el cual no han asistido entre otros algunos presidentes autonómicos. Como todos los años, estos actos de identidad nacional dan cuenta del carácter imperialista del Estado español, que hoy se expresa en las relaciones que mantiene con sus enclaves coloniales como Ceuta y Melilla o la grandes empresas establecidas en Latinomerica.
Ofensiva de la derecha en Catalunya
Pero este año, a estos actos de carácter imperialista y chovinista se le agrega la ofensiva recentralizadora contra las autonómías. Es así que en Barcelona fue convocada una manifestacion “anti independentista” por organizaciones de la derecha intitucional y de extrema derecha de todo el Estado. Miles de personas han llenado la Plaza Catalunya y su perímetro con banderas españolas, senyeres y banderas europeas para manifestarse “en contra de la independencia”. Según los convocantes eran 100.000 personas, unos datos muy dudosos frente las datos de los mossos d’esquadra y los medios que han contabilizado entre 6.000 y 10.000. La concentración fue organizada por la Plataforma de España y Catalanes con el lema “Catalunya somos todos”, a la que se han añadido dirigentes del PP catalán como Alicia Sánchez Camacho, quien ha calificado la manifestación como «un éxito de la Cataluña real y de la Cataluña silenciosa» y como un «hecho histórico». También se han adherido diversas formaciones de derecha, como Ciutadans y UpyD (Unión Progreso y Democracia). A pesar de las declaraciones por parte de la plataforma de que no había de permitir la entrada de grupos falangistas o nazis estos se han disfrazado en la manifestación junto a la “masa ciudadana”.
El carácter opresor e imperialista de este Estado y su Régimen del 78’, heredero del Régimen de Franco, continúa reivindicando así a la “España, una, grande y libre” con una derecha envalentonada; esta vez rabiosa contra el derecho de las autonomías a su lucha por la autodeterminación. Ya hemos escuchado decir estos días al ministro de Educación José Ignacio Wert que hay que “españolizar a los catalanes”, mientras está llevando a cabo una reforma que va a llevar a la educación a la oscura época franquista. Otro ejemplo es el ataque de setenta individuos que al grito de “Viva España” entraron a golpes al acto de Bildú y Sortu en la Universidad de Zaragoza.
En el marco de recortes históricos y derechos de los trabajadores como la educación, la sanidad y servicios públicos, por un lado, y de un ataque brutal y racista contra los trabajadores no nativos a quienes se les ha negado hasta la sanidad pública, por el otro, en la manifestación de Barcelona, comenzó a hacerse más visible la derecha española y catalana. Una derecha que en los últimos meses se está reorganizando, como se vio en el casal fascista Tramontana en Barcelona y toda la publicidad que hicieron en el barrio de El Clot, donde se organizaron varias manifestaciones de vecinos y organizaciones de izquierda pidiendo el cierre de este casal. O la llegada de “Amanecer Dorado” en Málaga. Una primera respuesta contra la presencia de la ultraderecha, que puede actuar con total impunidad, fue una concentración en la Plaza Universitat en Barcelona, en la cual participó casi un millar de personas bajo el lema “antifeixistes sempre”.
Es necesario la mas amplia unidad entre los sectores de izquierda y las organizaciones trabajadores y estudiantes para dar una respuesta de clase y combativa, ya que si estos fenómenos no se combaten, el fascismo y la derecha avanzan, como muestra la experiencia de Grecia donde los discursos populistas son usados para confundir a sectores de la clase trabajadora sobre cual es su verdadero enemigo: los capitalistas y este sistema de explotación y opresión. Esta manifestación pre-anuncia a la polarización social como uno de los principales fenómenos políticos a los que hay que dar respuesta, a cinco años del inicio de esta histórica crisis capitalista.
Los fascistas no pasaran, nosotros pasaremos!
Barcelona, 12-10-12